LO ACOMPAÑA A TODOS LADOS
Es para Martín, su madre,
un amuleto cuando arbitra
Dos tlaxcaltecas le asistieron en la final del Torneo Sub-15 BBVA Atlas vs América en el estadio Jalisco
NUEVEQUINCEMÉXICO
Martín Gerardo Juárez Jiménez decidió ser árbitro de futbol, una de las profesiones más difíciles, pero que, con el paso de los partidos, la libra con equidad.
Empero, se desempeña mejor cuando su madre lo acompaña, tenerla cerca, antes de arbitrar es como llenarse de energía.
"Cuando no está, siento que algo me falta, con ella tengo seguridad y confianza es mi amuleto de la buena suerte", expresó a Organización Editorial Mexicana el silbante de 25 años.
Y con su equipo arbitral, asume con responsabilidad cada partido designado por la Comisión de Árbitros; su actitud es de respeto dentro y fuera de la cancha.
Es la final del Torneo Sub-15 BBVA que disputan Atlas contra América en el estadio Jalisco.
Doña Gloria Jiménez Luna ocupa uno de los asientos en la tribuna, se alista para observar la actuación de su hijo.
Es el partido número 25 al que asiste a un estadio, con tres horas de anticipación.
En la víspera, Martín se aseguró que su progenitora viajara en avión del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México a Guadalajara.
El equipo arbitral que integra con los tlaxcaltecas Arturo Baños y Ángel Jiménez, desde cuartos de final, ha tenido éxito.
La final entre rojinegros y azulcremas terminó con empate a cero goles; el de ida en el estadio Azteca fue decisivo, Atlas se trajo un 3-2 con el que, al final se coronó y levantó su séptima corona en esta categoría.
Después del encuentro al que asistieron tres mil 500 aficionados, comentó que "todo lo que mi madre hace por mí, no tiene precio, por eso esta medalla es para ella, haberla tenido en el estadio es una bendición".
Aunque la carrera de Martín apenas empieza (dos años tres meses en el sector profesional), ha quedado demostrado -según las calificaciones del asesor- que es una promesa del arbitraje mexicano.
Gloria Jiménez, decana docente jubilada, dijo que tiene tres hijos: Diego Renato, Jesús Emiliano y Martín Gerardo, el mayor, con quien pasa mayor tiempo.
"Fui maestra de gimnasia y le enseño a mi hijo lo que aprendí: disciplina, respeto y pasión por lo que se hace", señaló.
Contó que los asesores de la Comisión de Árbitros han calificado con buen puntaje el trabajo de la terna arbitral y "esperemos que tengan seguimiento y que sean árbitros de Primera División".
Martín disfruta del arbitraje y antes de comenzar el juego, realiza un ritual en las inmediaciones del terreno de juego.
Tras el calentamiento, antes del silbatazo inicial se desplaza hasta la barda de la tribuna, ahí lo espera su madre quien amorosamente le da la bendición.
"Dios no se equivoca a quienes nos pone en el camino, gracias a quienes lo están viendo como al profesor Oscar Huerta Espinoza, él arbitra y estudia psicología", destacó.
Después del partido, el asesor corrigió detalles a los cuatro silbantes.
"Ustedes se merecen eso y más por todo los sacrificios que hacen para ver el fruto de su esfuerzo", destacó.
Para entonces, a Martín ya lo espera su madre quien tiene que regresar a la Ciudad de México.
En el protocolo no oficial, sobre el impecable traje oscuro, doña Gloria impone la medalla dorada con los logos de la Liga Sub-15 a su hijo.
Y el sentimiento los envuelve a la salida del estadio Jalisco.
Han sido años de mucho sacrificio, de ayunos y de constancia, pero también de resultados positivos.
Martín: "¡Felicitaciones, eres campeón!", susurró la progenitora al oído del árbitro.
"!Gracias!, ¡Mamá!" alcanzó a decir Martín.
LO QUE DIJO
Martín Juárez, árbitro.
"Que mi madre me ponga la medalla es algo increíble, solo ella y yo sabemos los sacrificios para estar aquí en esta final, pedimos a Dios por seguir creciendo en el arbitraje".
Es para Martín, su madre,
un amuleto cuando arbitra
Dos tlaxcaltecas le asistieron en la final del Torneo Sub-15 BBVA Atlas vs América en el estadio Jalisco
NUEVEQUINCEMÉXICO
La final Atlas vs América Sub-15 en el estadio Jalisco |
Empero, se desempeña mejor cuando su madre lo acompaña, tenerla cerca, antes de arbitrar es como llenarse de energía.
"Cuando no está, siento que algo me falta, con ella tengo seguridad y confianza es mi amuleto de la buena suerte", expresó a Organización Editorial Mexicana el silbante de 25 años.
Y con su equipo arbitral, asume con responsabilidad cada partido designado por la Comisión de Árbitros; su actitud es de respeto dentro y fuera de la cancha.
Es la final del Torneo Sub-15 BBVA que disputan Atlas contra América en el estadio Jalisco.
Gloria Jiménez, decana maestra, con su hijo árbitro de futbol |
En la víspera, Martín se aseguró que su progenitora viajara en avión del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México a Guadalajara.
El equipo arbitral que integra con los tlaxcaltecas Arturo Baños y Ángel Jiménez, desde cuartos de final, ha tenido éxito.
La final entre rojinegros y azulcremas terminó con empate a cero goles; el de ida en el estadio Azteca fue decisivo, Atlas se trajo un 3-2 con el que, al final se coronó y levantó su séptima corona en esta categoría.
Después del encuentro al que asistieron tres mil 500 aficionados, comentó que "todo lo que mi madre hace por mí, no tiene precio, por eso esta medalla es para ella, haberla tenido en el estadio es una bendición".
Aunque la carrera de Martín apenas empieza (dos años tres meses en el sector profesional), ha quedado demostrado -según las calificaciones del asesor- que es una promesa del arbitraje mexicano.
Gloria Jiménez, decana docente jubilada, dijo que tiene tres hijos: Diego Renato, Jesús Emiliano y Martín Gerardo, el mayor, con quien pasa mayor tiempo.
Martín Gerardo Juárez Jiménez dirigió la final Sub 15 BBVA 2019 |
Contó que los asesores de la Comisión de Árbitros han calificado con buen puntaje el trabajo de la terna arbitral y "esperemos que tengan seguimiento y que sean árbitros de Primera División".
Martín disfruta del arbitraje y antes de comenzar el juego, realiza un ritual en las inmediaciones del terreno de juego.
Tras el calentamiento, antes del silbatazo inicial se desplaza hasta la barda de la tribuna, ahí lo espera su madre quien amorosamente le da la bendición.
"Dios no se equivoca a quienes nos pone en el camino, gracias a quienes lo están viendo como al profesor Oscar Huerta Espinoza, él arbitra y estudia psicología", destacó.
Después del partido, el asesor corrigió detalles a los cuatro silbantes.
"Ustedes se merecen eso y más por todo los sacrificios que hacen para ver el fruto de su esfuerzo", destacó.
Para entonces, a Martín ya lo espera su madre quien tiene que regresar a la Ciudad de México.
En el protocolo no oficial, sobre el impecable traje oscuro, doña Gloria impone la medalla dorada con los logos de la Liga Sub-15 a su hijo.
Y el sentimiento los envuelve a la salida del estadio Jalisco.
Han sido años de mucho sacrificio, de ayunos y de constancia, pero también de resultados positivos.
Martín: "¡Felicitaciones, eres campeón!", susurró la progenitora al oído del árbitro.
"!Gracias!, ¡Mamá!" alcanzó a decir Martín.
LO QUE DIJO
Martín Juárez, árbitro.
"Que mi madre me ponga la medalla es algo increíble, solo ella y yo sabemos los sacrificios para estar aquí en esta final, pedimos a Dios por seguir creciendo en el arbitraje".
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